Rusia lanzó un bombardeo con dos misiles Iskander-M contra el Instituto Militar de Comunicaciones de de Poltava, en Ucrania central. Al menos 51 personas murieron y casi 300 resultaron heridas. Además de la conmoción y la condena a Rusia desde dentro y fuera del país, el hecho también despertó críticas por posible negligencia de mandos militares. El presidente Volodímir Zelenski aseguró que habrá una investigación.